Ser Guapa o Guapo

Ser guapa o guapo 

 Ser guapo o guapa puede ser un problema.

Esta historia o cuento, se puede contar a los Niños y Niñas, para que No se dejen engañar por las apariencias de “belleza” o “fealdad”.

Así, cuando por primera vez se acerca una persona a ti… independientemente de su edad, de su “belleza”, o de su “fealdad”… uno – inicialmente – debe confiar y considerar  que es buena persona…

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Hace mucho… pero que mucho tiempo… en un país muy lejano… Había un niño muy guapo… pero que muy guapo… que vivía con su familia en un pueblecito desde el cual se divisaba una gran montaña.

El niño era muy feliz, se divertía mucho con sus amigos y tenia muchosss amigos.

El niño era alegre, bueno, reía y compartía lo que tenia y sus juguetes. 

Pasaron los años y el niño se convirtió en un hombre y su guapura aumento… era guapo… pero que muy guapo.

Y empezaron los problemas, pues las chicas del pueblo empezaron a pedirle que se casara… lo seguían, lo perseguían y no lo dejaban en paz.

Lo hablo con su familia y decido cambiar a una ciudad próxima.

Al poco de vivir en la ciudad, las chicas empezaron ha hacerle proposiciones de casamiento… pero él no quería casarse, él quería ser libre y vivir tranquilo y en paz.

Volvió a su pueblo y contó a sus padres lo sucedido en la ciudad y decidió irse a un monasterio, para encontrar la paz y aprender a Meditar.

Sus padres le informaron de un monasterio muy lejano en el que había un Gran Maestro.

El hombre guapo… pero que muy guapo…  se despidió de sus padres y se dirigió hacia el monasterio.

Llegó al monasterio y solicito audiencia con el Gran Maestro.

El Maestro lo recibe y le dice: tu dirás…  el hombre guapo le cuenta al Maestro las dificultades que tiene en la vida por ser guapo y solicita ser discípulo.

El Maestro le dijo… puedes empezar ahora mismo, si así lo consideras… el hombre guapo… pero que muy guapo… dijo… de acuerdo.

Así es como empezó su nueva vida… recibiendo enseñanzas y aprendiendo a Meditar.

El maestro se dio cuenta de que era muy hábil con la Meditación y en sus trabajos diarios para la comunidad… también se dio cuenta de que progresaba muy rápidamente.

Varios meses después… el hombre guapo, pero que muy guapo… solicito audiencia para hablar con el Maestro…

El Maestro lo recibe y le dice: tu dirás… el hombre le comenta: Maestro soy feliz en el monasterio, me siento feliz haciendo los trabajos a la comunidad y estoy consiguiendo niveles altos de Meditación… pero mi belleza parece ser que aumenta con la Meditación y solicito que me ayude dándome una solución, pues algunos monjes me distraen constantemente, siendo difícil realizar mis tareas y Meditar…

Si le parece me podría enviar a otro monasterio, con menos discípulos.

El Maestro se queda en silencio… y le dice… eres un gran Discípulo y si te envió a otro monasterio, aunque no tenga tantos discípulos como este… estoy seguro que al poco tiempo tendrás el mismo problema… ya que tu belleza física es muy atrayente.

Así que, te voy a enseñar una Meditación… por medio de la cual puedes transferir tu conciencia a otro ser humano, que no sea tan guapo.

El Maestro lo instruyo en la Meditación de la Transferencia de la Conciencia a otro ser Humano y en como debía pedir a la Conciencia de un ser humano, si quería cambiar de cuerpo físico… y le dijo, que solo debía hacer la Transferencia de Conciencia si aceptaba la otra Alma o Conciencia…

Una vez aprendida e incorporada la Meditación de la Transferencia de Conciencia… el Maestro autorizo al Discípulo a salir del monasterio en busca de un Alma que quisiera cambiar de cuerpo físico.

El Discípulo guapo, pero que muy guapo…  fue al pueblo más cercano y situándose en el Presente hablaba con las personas a través de la palabra y simultáneamente con la voz de la Conciencia (Telepatía)… se comunicaba con sus Almas.

Y una a una o Alma a Alma… les solicitó si querían cambiar de cuerpo físico… y no encontró a nadie que quisiera cambiar la Conciencia… a su cuerpo.

Después de varios días, decidió volver al monasterio.                                                   Andando por los caminos que conducían al monasterio, se sentó a descansar a la sombra de un árbol… al poco vio como se acercaba un hombre… haciendo eses (zig-zag)… en su caminar… al que le costaba mantenerse en pie…                                   El hombre no era guapo… más bien un poco feo.

El Discípulo le pregunta que si se encuentra bien… el hombre le dice que sí, que esta bien, pero que necesita descansar un poco… y por la forma de hablar – el Discípulo guapo, pero que muy guapo – deduce que el hombre estaba ebrio (borracho).

El hombre se tumba y se queda dormido.

El Discípulo se dice: esta es una buena oportunidad… así que, se pone en Meditación y comprueba que el hombre está en el Sueño Lucido.

El Discípulo entabla una conversación con él y le dice que si quiere cambiar de cuerpo físico durante tres años… el hombre mira el cuerpo físico del Discípulo y ve lo guapo… pero que muy guapo, que es… y le dice… na- na- naturalmente que si… estoy totalmente de acuerdo… si… si… cambiémoslo ya.

Siendo así dentro de tres años nos vemos en este mismo lugar, junto a este árbol.

El Discípulo dice las palabras Mágicas (Mantra) y la Conciencia es transferida de un cuerpo al otro.

El hombre abre los ojos y ve que efectivamente su cuerpo lo tiene el Discípulo, con el que se estaba comunicando en el sueño… el hombre sale corriendo… dando saltos de alegría y diciendo… yupiiii tengo un cuerpo nuevo y guapo… como me lo voy a pasar… yupiii.

El Discípulo abre los ojos con dificultad y comprueba que le cuesta mover un cuerpo maltrecho, dolorido y ebrio.

El Discípulo realiza durante una hora, las técnicas que aprendió en el monasterio para revitalizar el cuerpo… – o sea, Pranayama o Respiración rítmica y consciente– consiguiendo recuperar un poco el cuerpo físico… del anterior hombre.

Varias horas después llegó al monasterio y pidió audiencia con el Maestro diciendo una palabra Mágica que era el emblema del monasterio…  pues nadie del monasterio lo conocía.

El Maestro lo recibe… le da un Fraternal Abrazo y los monjes que observan la escena se quedan boquiabiertos… los monjes no sabían que anteriormente era el Discípulo guapo, pero que muy guapo.

El Maestro lleva al Discípulo a una sala contigua y le dice que puede continuar con sus Meditaciones y sus tareas Conscientes..

Pocos meses después había recuperado el cuerpo físico del hombre ebrio… e incluso había mejorado su apariencia… entonces se dedico de lleno sin que nadie le interrumpirá a sus Meditaciones.

Dos años después llego a experimentar Satori (Chispazo de Iluminación) y llego a un nivel alto de Maestría.

Un día, el Maestro se dirige al Discípulo y le dice tu trabajo esta muy avanzado en lo Espiritual…

Se acerca la fecha en la que se cumplen los tres años en que quedaste en recuperar tu cuerpo físico… así que, puedes ir al encuentro del Alma con la que quedaste, para hacer el intercambio.

Esa noche el Discípulo, se conecta en el Sueño Lucido con el hombre, y quedan en encontrarse un día y a una hora, en el árbol.

El Discípulo calcula el tiempo que le llevara y se dirige hacia el lugar donde quedo con el hombre para volver a recuperar su cuerpo físico…

El discípulo llego primero y se sentó debajo del árbol esperando al hombre… al poco lo ve venir y conforme se va acercando se da cuenta de que había casi destrozado a su cuerpo físico… su cuerpo físico estaba irreconocible uy maltrecho.

El hombre le dice que como se acercaba la fecha llevaba un día sin ir de fiesta y sin beber…

Así que, se tumba en el suelo y se queda dormido… el Discípulo entra en Meditación para finalizar el acuerdo.

Ya en el Sueño Lucido… el Discípulo le dice que como le ha ido con el nuevo cuerpo… el hombre le explica las aventuras y el éxito que ha tenido con ese cuerpo guapo, pero que muy guapo… y le pide al Discípulo que si puede seguir con el cuerpo de guapo…

El Discípulo, mira a su anterior cuerpo… y “Ve” que esta muy deteriorado… “Ve” que los canales energéticos estas muy deteriorados, por lo cual le llevará mucho tiempo recuperarlo y “Ve”, que el cuerpo que tiene ahora esta muy revitalizado.

Así que, el Discípulo le dice…  si es tu decisión… estoy de acuerdo, sigamos cada uno con el cuerpo físico del otro.

Así que, se despidieron y cada uno volvió a su hogar.

El Discípulo llego a suceder a su Maestro en el Monasterio y los que sabían “Ver”, podían “Ver”… como su Belleza interior resplandecía más allá de su apariencia física… por eso debemos propiciar el ver la Belleza interior  de cualquier ser Humano, independientemente de su apariencia física… y solo los que saben “Ver”   – desde el Corazón – pueden ver realmente esa Belleza.

Y colorín colorado este cuento o historia, se ha acabado.

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Inspiro-Espiro

Con Profundo Amor

Rabsal

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Posdata: Mis Deseos de que este Blog sea y sirva, para que el ser humano, se convierta a sí Mismo, en un Ser Humano Integro.

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Feliz Día